miércoles, 13 de mayo de 2009

A FLOR DE...


Ando en mis controversias,
Mi amiga de mar lame mis pies con su vocación de ola
Yo a todo lo ancho de mí, pierdo credibilidad,
No valgo un peso,
Pero, ¿para que darle valor a lo inaudito de estos crepúsculos prestados?
Ando en mis controversias,
Un día estío, otro aterido,
Otro incierto,
Soy un poco menos
De lo que ayer amaban de más.
A mis treinta y tantos ¿cómo esperar que alguien me entienda?
Ni yo lo consigo,
Me avergüenzan estas elucubraciones
Y lo rebuscado de las palabras con que me defiendo,
Sería de mucha ayuda no haberte leído jamás maldito león de…
Ni haberte cantado amado Leonardo.
Yo corazón de caballo sabanero
Pluma de barranquero perdida en el cotejo amoroso,
Vacante sátira, alevoso y truhán impostor de la palabra.
Nada mío,
Todo robado.
Ajeno en cuerpo y alma a estas circunstancias
Que me aferran una vez más a lo irrefutable.
Yo en lo más profundo de mi sacramental pérdida.
Yo en parte culpable,
En parte santo
En el todo perdido.
Amén de mi más reciente patraña
Exultado en el averno del dulce cáliz
Que no aparto.


13 de mayo de 2009


viernes, 8 de mayo de 2009

LETRAS CONFERIDAS

Canto a mi mismo(10).


“A mis cuarenta y diez,
cuarenta y nueve dicen que aparento...”


De una cancion de Joaquin Sabina.

Ha llegado -por fin-
el esperado día,
la ansiada noche,
en que he de encontrarme:

conmigo,
contigo y
con todos.

Debemos reunirnos - en estos tiempos aciagos-
con Baco y su cofradía,
con Dionisios y sus Orfeos,
con Juno y sus beldades.
con Afrodita y sus ninfas ansiosas
con Venus y sus Musas,
con Eros y sus Concubinas,
con Cupido y sus saetas certeras.

No ha de faltar nadie,
digo, que no ha de faltar nadie.

Ven, acercate,
serás bienvenido a esta bacanal,
con esa delisiosa bebida fermentada,
cuidada por Zeus y el Olimpo en pleno,
para gozo nuestro:

Eternos mortales,
eternos ebrios de belleza,
eternos hedonistas.



Para que estos ojos
puedan seguir mirando: el mar y su infinito atardecer.

Para que estos labios
puedan probar, otra vez, esos, tus labios carnosos.

Para que estas manos – aún firmes -
puedan tocar, tu piel tremula.

Para que este cuerpo – aún terso-
pueda echarse a rodar -con el tuyo-
en esta redondez, que nos da cobijo.


Mira como fluye, de boca en boca, este liquido carmesí.

Mira como se brinda, con esta bebida bermeja, que da gozo a nuestro espiritu terrenal.

Mira, como se juntan todos, a un solo cuerpo, a una sola voz: Cantando, brincando, aullando, gritando:


¡ Bienvenido,

años
Sin cuenta !.

ALFONSO ARCILA G.

MIRAR DE FRENTE

  -No mires con disimulo, mira fijamente - aconseja Gurdjieff a su hija. Desde pequeño escuché decir que los ojos son el espejo del alma, ...